Mientras que las detenciones de migrantes y las solicitudes de asilo aumentaron en conjunto 840 por ciento en la última década, el presupuesto del Instituto Nacional de Migración (INM) se ha mantenido estancado y el la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) es aún insuficiente.
De acuerdo con cifras oficiales, durante 2013 se registraron 87 mil 594 migrantes detenidos o que solicitaron refugio. Diez años después, entre enero y noviembre de este año, la cifra aumentó a 823 mil 666.
No obstante, aunque las detenciones y las solicitudes de asilo se han disparado, el presupuesto asignado para los organismos encargados de realizar esa labor no solo no ha aumentado, sino que registró una pequeña disminución.
Según los presupuestos de egresos, en 2013 les asignaron mil 917 millones de pesos al INM y a la Comar, mientras que este 2023 recibieron mil 817 millones de pesos, lo que representa una disminución del cinco por ciento.
Para el 2024, se aprobó un presupuesto para ambos organismo de mil 948 millones 929 mil 841 pesos, lo que representa un aumento del 7 por ciento respecto a este año.
Consultado al respecto, el ex comisionado del Instituto Nacional de Migración, Tanatiuh Guillén, advirtió que el tema migratorio no es cuestión de dinero, pero dijo que en los recursos asignados se refleja el interés en atender el asunto.
“No es una cuestión de dinero, es un asunto de política y es lo que hay que cambiar”, afirmó.
“Por eso es tan importante hacer la distinción entre migrante en general y refugiados, si haces el énfasis en refugio estamos obligados a brindar un mecanismo de protección y es lo que no estamos haciendo”, finalizo.