En el pleno de la Cámara de Diputados, los partidos de oposición lograron frenar la iniciativa de reforma electoral del presidente Andrés Manuel López Obrador que planteaba modificar la Constitución.
Durante la sesión de la tarde de este martes, la propuesta obtuvo 269 votos a favor, 225 en contra y una abstención, lo que significa que se quedó corta de la mayoría calificada que requería (dos terceras partes de los 500 votos posibles).
Ahora, la Cámara de Diputados espera que el gobierno federal presente lo que llama su “plan B”, un paquete de iniciativas de reforma a leyes secundarias.
La reforma constitucional del presidente planteaba puntos como suplir al Instituto Nacional Electoral (INE) por Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC), desaparecer a los institutos electorales locales y reducir el número de diputados federales y senadores.
Otro punto que generaba polémica era que los consejeros electorales fueran electos por la ciudadanía.
El gobierno federal y Morena afirman que estos cambios son benéficos para la democracia, algo que rechazan las fuerzas políticas de oposición.
La administración de López Obrador tiene varias semanas elaborando su plan alternativo, que anunció cuando la oposición advirtió que seguiría unida contra la reforma presidencial constitucional.
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