Por: José Luis Domínguez Castillo
Ante la desconfianza, falta de credibilidad y abusos, que ha provocado manifiesto descontento por las propuestas sin razón que hacen no pocos políticos en los congresos legislativos, la Prensa retoma su poder al servicio de la sociedad. El debate de trascendentales temas para la vida futura de los mexicanos ya no está en las cámaras, sino en los medios de comunicación.
El Gobierno de Estados Unidos se preocupa por el interminable caso de los indocumentados, la portación de armas en los colegios y sus conflictos bélicos con otras naciones; España llamó la atención durante la semana pasada por aprobar finalmente, y por unanimidad, la recuperación de la asignatura de filosofía en el bachillerato, mientras que en México se centra una discusión –lucha y defensa- sobre una propuesta más grave: legalizar el aborto…y Chihuahua lo rechaza.
La polémica desbordada en los medios de comunicación es debido a la iniciativa que presentará Morena en el Congreso de la Unión para legalizar el asesinato de niños inocentes no nacidos. Hubo, como respuesta, marchas y concentraciones pacíficas a nivel nacional: en esta capital coincidió con la visita del próximo presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y las reacciones resultaron interesantes.
Previo a la gira de AMLO y protesta de cientos de familias reunidas en el Centro, los periódicos locales –impresos y digitales-, programas de radio y noticieros de televisión, presentaron inusitado interés del tema en apoyo a los chihuahuenses. Destacó la encuesta realizada por El Heraldo de Chihuahua, en su versión de Internet, donde más de 20 mil personas participaron y mostraron, arriba del 90%, su rechazo a esta iniciativa.
El mismo medio realizó un sondeo, con quienes tendrán la responsabilidad de tomar una determinación final, con la pregunta si están “A favor o en contra del aborto”, y de 23 diputados locales, 17 afirmaron estar en contra y seis a favor; siete de 13 legisladores federales consultados, seis estuvieron en contra y solo uno afirmó estar de acuerdo.
Causó sorpresa que incluso algunos integrantes de Morena no se atrevieron a manifestar claramente su aprobación y contestaron como “debe analizarse”. La excepción, contraria, fue la que ofreció el senador Cruz Pérez Cuéllar: “Voy a defender la vida en el Senado”, seguido por otra contundente expresión de la alcaldesa María Eugenia Campos Galván de “Simplemente, yo digo sí a la vida”.
Este es solo uno de tantos temas que deberán abordar los representantes del pueblo, pero ante su forma de actuar, la sociedad les da la espalda y buscan el cobijo de los representantes de los medios de comunicación, como lo hemos visto en múltiples ejemplos, a nivel mundial.
Como lo considera el profesor universitario y politólogo español, Fernando Vallespín Oña, “puede que todo tenga que ver con el extraño rol al que ha sido relegado el parlamento. El verdadero lugar de debate ya no está en las cámaras, sino en los medios de comunicación y, desde hace ya algún tiempo, en las redes sociales….
…Lo peor de todo es que de esta manera se alimenta el circo mediático y el Congreso acaba convirtiéndose en un plato más, en el ágora de “la clase discutidora”, que más que discutir entre sí escenifica un permanente simulacro de debate político donde lo que se busca no es convencer al adversario, sino a nosotros los espectadores”.
Esperemos que López Obrador entienda y atienda a las mayorías y no a las minorías. De hecho, en su breve estancia por la capital, recibió de los manifestantes Pro-Vida la pañoleta azul celeste “Salvemos las 2 vidas”, que es el eslogan utilizado en Argentina donde hace unos meses ganaron este debate.
Mientras tanto, debemos reconocer y agradecer a todos esos medios de comunicación comprometidos con las verdaderas causas de los millones de mexicanos, presionando y tomando ese importante rol de cambiar las cosas para un mejor futuro de nuestras familias.
