Los bebés hacen bromas desde los cuatro meses y, a partir de los dos años, juegan con el lenguaje y empiezan a burlarse de los demás
Dicen que tener sentido del humor es señal de inteligencia. William Hauck y John Thomas, dos investigadores de la Universidad de Bucknell, en Estados Unidos, lo comprobaron hace décadas con un estudio donde evaluaron a 80 niños de primaria. Los resultados confirmaron que había una correlación muy positiva entre inteligencia y humor.
Una nueva investigación de la Universidad de Bristol, en Reino Unido, ha demostrado que los seres humanos tenemos sentido del humor casi desde que nacemos. Los investigadores descubrieron que con un mes de vida, los niños aprecian el humor y comienzan a hacer bromas desde los cuatro meses.