Más allá de los resultados en votos, haciendo dos campañas paralelas, a contrapelo, con la guerra socia a todo vuelo, Maru Campos se alzó ayer como la gran triunfadora.
A la media noche, el Instituto Estatal Electoral, informó que el conteo rápido realizado por el INE, con una muestra de 217 casillas y análisis científico, se determinó que la candidata del PAN-PRD tiene la tendencia favorable con una votación mínima del 41.9% y máxima del 46.6%.
Por su parte, Juan Carlos Loera obtendría una votación mínima del 30.9% y máxima de 34.6%.
Anoche hubo momentos de confusión: apenas terminaba la jornada electoral, a las 6 de la tarde y tanto la candidata del PAN-PRD, Maru Campos, como el candidato de MORENA, Juanca, cantaban victoria.
Luego, ya entrada la noche, Juanca convocó en su feis a festejar en Juárez. Al final no hubo nada.
En cambio, en la capital hubo fiesta azul, en serio. Para ese momento ya nadie dudaba del resultado sin que se tuvieran datos o cifras precisas, solo se habla de tendencia.
Por eso Maru se convierte en la gran triunfadora de la jornada, es más, de la elección, porque se sobrepuso a todas las adversidades.
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El candidato del PAN-PRD, Marco Bonilla alcanzaría poco más del 51% de la votación total para convertirse en el próximo nuevo alcalde de la capital de Chihuahua.
Mientras que su principal contrincante, Marco Adán Quezada Martínez, de la coalición MORENA-PT-Nueva Alianza, reconoció que los resultados no le eran favorables, agradeció a todo su equipo y dio por finalizada su participación en esta jornada.
Desde temprano, el joven Bonilla declaró su triunfo, un triunfo contundente que nadie objetó ni cuestionó. En cuestión de horas se confirmó el resultado.
Dijeron que se trató de un “arrastre” de la candidata a gobernadora, Maru Campos, que los de enfrente no había pegado suficiente y que el intento de fragmentación de la votación no fructiferó.
Este Fisgón cree que se concatenaron todas las circunstancias, pero la realidad es que Bonilla arrancó con mucha ventaja y la mantuvo en toda la campaña.
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A nivel estatal la votación apenas si logró superar el 40 por ciento (%) pero a nivel nacional se estima que la participación fue de 23 millones de votantes, es decir, entre un 51.7 y 52.5%.
Según datos preliminares dados a conocer por el presidente del INE, Lorenzo Córdova, MORENA obtuvo entre el 34.9 y un 35% del total de la votación prevista.
El PAN se situaría entre un 18.5 y un 19.3%; el PRI entre el 17 y el 18%; el PRD de un 3.5 a un 3.9%; Movimiento Ciudadano entre el 7.1 y 7.5%, siendo los principales.
De esta manera, el PAN estaría obteniendo entre 106 y 117 diputados federales para la integración de la Cámara de Diputados, la principal disputa malograda en contra de MORENA.
El PRI podría alcanzar entre 63 y 75 legisladores, el PRD entre 12 y 21, el PVEM entre 40 y 48, el PT entre 35 y 41, Movimiento Ciudadano de 20 a 27, MORENA entre 190 y 203 y el PES de 0 a 6.
El resto de los mini o nanopartidos no alcanzarían diputados y por ende, perderían el registro.
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Hablando de triunfos, este Fisgón no equivocó en vaticinar el del candidato de MORENA para la alcaldía de Juárez, Cruz Pérez Cuéllar.
Con sus datos preliminares, el senador se convertirá en el próximo alcalde de la frontera con 15 puntos porcentuales, es decir, unos 75 mil votos.
Cruz de volada cantó un tiro: “hemos ganado la elección en Juárez de manera contundente, radical y vamos a defender nuestra victoria; que le quede muy claro al PRIAN que Juárez es territorio Obradorista y que vamos a defender esta victoria”.
No se debe olvidar, como no lo hizo el morenista, que tiene un gran pendiente jurídico que lo seguirá persiguiendo y para ello, afirma que seguirá defendiendo victoria por todas las vías necesarias, como la jurídica y la política, porque el pueblo de Juárez ha decidido su victoria.
Era impensable que los otros pudieran alcanzarlo, tenía mucho tiempo tras ese cargo y por fin se le hizo realidad y cuidado, porque se coloca en la línea de tiro para el siguiente sexenio.
