Francisco Pedroza ya tiene 25 años practicando el taekwondo, y después de una larga trayectoria, finalmente en el 2021 tendrá la oportunidad de cumplir con el sueño olímpico tras haber clasificado a Tokio 2020, en la categoría K44 más de 75 kilos, donde espera cerrar con broche de oro su carrera deportiva.
En el inicio de su camino en el taekwondo, el chihuahuense competía en eventos con deportistas convencionales y fue hasta el 2013 cuando comenzó a incursionar en el parataekwondo, y una medalla mundial y la clasificación a los Juegos Paralímpicos, son sus logros más importantes en esta modalidad.
En el 2016 llegó a ser parte por primera vez de una selección nacional, algo que venía buscando en todo su trayecto como deportista, y ese logro lo motivo para continuar cumpliendo sueños, y en marzo de este año en Costa Rica logró ese boleto a los Paralímpicos.
¿Desde cuándo prácticas el taekwondo?
“Yo práctico desde los siete años, y empecé con el kenpo karate por mi papá, quien siempre quiso practicar un arte marcial y económicamente no pudo hacerlo. Entonces ahí duré cinco años, y después descansé un tiempo porque entré en mi etapa de crecimiento, y a los 15 años me invitó un compañero a una clase muestra de taekwondo y me gustó mucho”.
¿Y solo practicabas el taekwondo de forma recreativa o también competías?
“A los 18 años hago mi cinta negra, y empiezo a competir en selectivos regionales y estatales, y de primera fuerza, en torneos con deportistas convencionales. De ahí entró a la Universidad, y entré al equipo representativo de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, e igual fui campeón estatal y regional durante los cuatro años de mi licenciatura, además llegué a los nacionales, pero nunca pude llegar al podio, y siempre quedaba en la primera y segunda ronda”.
Después de esa etapa universitaria ¿Qué siguió para ti?
“Después de esa etapa puse mi escuela en el 2003, y empecé a dar clases, y seguí compitiendo en eventos nacionales de mi organización y en eventos de primera fuerza competí dos años más, y luego dejé de participar. En el 2012 se vino la Liga Mexicana de Taekwondo, con el formato del Team 5, y se hizo un equipo en Ciudad Juárez donde me invitaron, y participé en la primera temporada de la liga, y fui titular, pero pensé que no lo sería porque en el equipo estaban muchachos de selección, pero conforme pasaban los entrenamientos se fueron lesionando y me metieron, y ya no me quitaron de titular por toda la temporada”.
¿Cómo llegó a tu vida el deporte del ParaTaekwondo?
“Después de que terminó la temporada en la liga, y luego de tener una lesión en mi rodilla en la última jornada, dije ya estuvo, me voy a retirar. Un año después el profesor Dae Woon Mon me comentó que empezó a surgir el ParaTaekwondo en el mundo, que ya se habían celebrado dos o tres campeonatos mundiales. Entonces empecé a investigar y en el 2013 se realizó el Mundial en Lausana, Suiza, y comencé a buscar los recursos para participar, porque en aquel tiempo no se apoyaba. Finalmente conseguí que la federación me apoyara con hospedaje y avión, y los viáticos lo conseguí con patrocinios, y recuerdo que la selección mayor fue a esa misma ciudad a un abierto para competir”.
¿Cuál fue tu sentir de haber participado en tu primer Mundial y primera justa a nivel internacional?
“En ese Mundial quedé en quinto lugar. Para mi fue un cambio muy drástico porque peleaba con convencional, y en ese entonces no competía con los petos electrónicos, y me los puse por primera vez, por lo que fue muy complicado. A parte la regla en la cabeza, yo estaba muy acostumbrado a patear arriba, y en el ParaTaekwondo solo pateamos al peto, y la técnica hacia el peto electrónico cambia mucho, entonces si me costó mucho tiempo adaptarme, y esa vez que peleé en Lausana contra un ruso, le pegaba y sonaba el golpe en todo el gimnasio, pero no marcaba, y él me rozaba y conectaba los puntos, y me llegaba la desesperación”.
Esa participación en el Mundial ¿te hizo continuar en el deporte?
“Después de ese Mundial competí en la siguiente edición en Moscú, Rusia, en el 2014, y también estuve buscando los apoyos y la federación me apoyó y a mi entrenador. En ese torneo obtuve también el quinto lugar. En el 2015 quedé campeón panamericano en Aguascalientes, y al siguiente año se hace otro panamericano en Querétaro donde retuve el título, y en el 2016 es cuando se hace el primer nacional de ParaTaekwondo y donde se formó la primera selección nacional”
¿Qué sentiste al ser parte de un equipo nacional?
“Siempre fue mi sueño. Como convencional siempre quise llegar a una selección pero nunca se me dio. Se hace el selectivo y era para conformar al equipo que iría al Panamericano de Costa Rica, y fue la primera participación que tuvimos como equipo, y ahí logré el bronce. Después se integró al equipo que iría al Mundial en Londres 2017 y logré el bronce, lo que fue la primera medalla mundialista para México”.
Cuando se dio la noticia que el ParaTaekwondo sería parte del programa paralímpico ¿qué pensaste en ese momento?
“Fue emoción y empecé a soñar de querer ir a unos Juegos Paralímpicos, porque realmente para mi el deporte adaptado me dio otra oportunidad en esto, entonces fue algo que no quise dejar pasar y estuve trabajando duro para conseguir ese sueño que era clasificar”.
Ahora que conseguiste el boleto ¿qué se siente ser deportista paralímpico?
“El objetivo de cualquier deportista es estar en los Juegos Olímpicos o Paralímpicos. La verdad estoy muy contento y mas que nada motivado para que ya podré estar ahí cumpliendo mi sueño, y ahora mi objetivo es prepararme fuerte para lograr subir al podio en los Paralímpicos”.
¿Con los Paralímpicos cerrarás tu larga carrera deportiva?
“Sí. Pienso que ya el cuerpo no da más y tiene su límite, pero ya veremos en ese momento que es lo qué pasa, cómo me siento, pero lo más probable es que ya me retiré. La motivación que tengo es que en los Paralímpicos tenga mis últimos combates, dar lo máximo, y hacer historia.