A pesar de contar con la protección del Protocolo de Seguridad, Francisco Romero Díaz, se convirtió la semana pasada en el periodista en activo número siete en ser asesinado en México en 2019.
Romero se desempeñaba en Yucatán, Quintana Roo como periodista y tenía poco de haber regresado a su ciudad, luego de haber permanecido en la Ciudad de México debido a amenazas en su contra.
Ahora, el compañero apodado “Ñaca Ñaca”, se suma a la lista de periodistas asesinados en el presente año: Rafael Murúa, el 20 de enero; Jesús Ramos, Reynaldo López y Samir Flores en febrero; así como Santiago Barroso y Omar Iván Camacho en marzo.
Ayer domingo, comunicadores de Quintana Roo a través de una carta abierta, exigieron a las autoridades poner un alto a la impunidad en contra de los crímenes contra los compañeros.
“Los comunicadores de Yucatán y de todo México no podemos quedarnos callados, nos sumamos en la exigencia a los tres órdenes de gobierno para que en cada entidad se garantice la plena libertad del ejercicio periodístico y libertad de expresión”, expresaron.
Además, advirtieron que ya no es posible tolerar más violencia en contra del gremio.
Apenas el viernes, en Chihuahua se presentó el “Índice Estatal de Libertad de Expresión en México 2019” que es una forma de análisis y seguimiento de las condiciones en las que se ejerce la libertad de expresión y la defensa de los derechos humanos.
El “Índice” fue elaborado por el Colectivo de Análisis de la Seguridad con Democracia (CASEDE), en colaboración con la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH) y la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).
Ahí se contienen las estadísticas de las agresiones, ahora lo que necesitamos los periodistas, es que sirvan para algo.
Mientras tanto, en el país seguimos alzando la voz en contra de los crímenes, como los compañeros de Yucatán, que exigen que el Gobierno Federal tome cartas en el asunto y que comience a ser aplicado de manera total y decidida, el protocolo de protección para la defensa del ejercicio periodístico.
El siete de junio próximo se conmemorará una vez más el Día de la Libertad de Expresión, derecho que no se limita a los comunicadores, pero son los comunicadores los más afectados con este clima de inseguridad.
El asesinato de periodistas debe ser erradicado por completo de México y, sin importar las condiciones de seguridad y armonía que reinen en cada entidad, debe darse un total respeto a la libertad de expresión.