Por Rafael Cano Franco
Muchas preguntas, cero respuestas de AMLO
Las conferencias mañaneras del presidente Andrés Manuel López Obrador, pudieran ser un excelente ejercicio informativo y de trasparencia, por desgracia han degenerado y se convirtieron en un show donde se hay abyección de algunos periodistas, mucho béisbol como tema recurrente, consejos religiosos, pero nada de “carnita informativa”, sobre todo en los temas que importan.
Cuando hay preguntas incómodas, López Obrador “las batea”, simplemente dice que no responderá y desvía la charla informativa a sus gustos deportivos y capacidades beisboleras.
Lo más lamentable es que el presidente miente o asevera falsedades; la semana pasada López Obrador hizo 96 afirmación en sus conferencias de prensa mañaneras, pero 80 de ellas eran falsas y solamente 16 tenían elementos de verdad.
¿Si no va a informar con la verdad, para qué el desgaste de un ejercicio que no va a ningún rumbo?
Hay temas que al Ejecutivo Federal le disgustan sobremanera y para nada quiere abordarlos; ahí está el caso de los 140 mil millones de pesos que se han entregado de manera directa a empresas sin licitación de por medio y cuya única justificación es que ahora sí hay honradez y eso nos obliga a los ciudadanos a creer que se hará buen uso de ese dinero público.
A pesar de existir opacidad niegan la posibilidad de corrupción y nos piden un salto de fe para creerles son diferentes a los que gobernaron antes, pero cuyos actos los muestran iguales.
En las conferencias mañaneras, incluso desde antes, se dijo y se repitió hasta el cansancio que al eliminar la corrupción tendríamos 150 mil millones de pesos, esa cifra sumada a una similar por la cancelación de la construcción del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México daría recursos suficientes para fondear programas sociales y apuntalar un desarrollo sostenido.
Pero ahora disgusta se les cuestione sobre la capacidad administrativa del nuevo gobierno; no solamente esos 300 mil millones de pesos son inexistentes; tampoco hay ahorros por los despidos de burocracia, ni por la venta del avión presidencial –en realidad se pagan millones de pesos por mantenerlo arrumbado—y como en sus proyecciones el dinero no va alcanzar, entonces reviven impuestos que ya habían desaparecido, como es la propuesta de volver a cobrar tenencia por la posesión de vehículos.
Otro tema intocable en las conferencias mañaneras de López Obrador, es el referente a la suspensión de los apoyos para el campo; bajo el argumento de la necesidad de ser autosuficientes en la producción de alimentos, el gobierno federal aseguró que el 80 por ciento de los recursos se quedaban en la bolsa del 20 por ciento de los productores.
La falta de respaldo a los productores agrícolas genera movilizaciones en Sonora y Sinaloa, las dos entidades líderes en producción alimentaria; las organizaciones de agricultores han señalado al gobierno federal que si bien se llevan el 80 por ciento de los recursos presupuestales, su producción representa el 80 por ciento de los alimentos en México, es decir la proporción es justa.
La educación media superior es otro tema donde no hay respuestas para explicar los motivos que llevaron a recortar 4 mil 500 millones de pesos a dos subsistemas que atienden a casi medio millón de estudiantes, como lo son los Colegios de Bachilleres y los Cecytes.
En materia de Educación Media Superior se recortó un 18 por ciento el presupuesto federal, eso representa 3 mil 500 millones al Colegio de Bachilleres y mil millones al Cecytes, la afectación es tal que hay proyecciones donde se indica que los planteles solo estarán en posibilidad de brindar clases hasta julio de este año y además se reducirá el número de admisiones a nuevo ingreso.
El gobierno federal no atina todavía a explicar porque a los jóvenes que no estudian se les asignó una partida presupuestal de 44 mil millones de pesos, a través del programa “Jóvenes Construyendo el Futuro”, mientras que a los que sí van a la escuela se les redujo en 23 mil millones de pesos luego de eliminar tres programas educativas y quitarles recursos a otros 32 programas.
El silencio que guarda el presidente López Obrador sobre los temas importantes y que afectan directamente a diversos sectores de la ciudadanía, ya le pasaron factura; la empresa “Investigaciones Digitales”, que presenta sus trabajos de investigación de opinión pública en el programa de Radio Fórmula que conduce Ciro Gómez Leyva, apenas ayer presentó números que deben alarmar a la presidencia: la aprobación del presidente cayó a un 62 por ciento y la calificación que dan a su gobierno es de 57 por ciento, súmenle los abucheos en eventos públicos para darse cuenta que la luna de miel ya terminó y el bono democrático va en caída libre.
Rafael Cano Franco, es reportero y conductor de noticias, preside el Foro Nacional de Periodistas y Comunicadores A.C.