• Los productos azucarados en exceso, como opción para calmar la sed son un riesgo para la salud
• El cuerpo necesita del agua para mantener el funcionamiento de sus procesos vitales
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), a través de su delegación en Chihuahua, alerta sobre los riesgos que conlleva el consumo excesivo de bebidas azucaradas, por lo que exhorta a retomar el uso del agua natural para calmar la sed.
Cuando existe un faltante de agua en el cuerpo se activa una sensación llamada sed, que alerta e indica que hay que reponer el líquido perdido. Desafortunadamente la gente mantiene el hábito de consumir bebidas azucaradas para calmarla, lo que funciona solo temporalmente ya que éstas bebidas no hidratan y por el contrario incrementan los niveles de azúcar en la sangre alterando el metabolismo.
La licenciada Magdalena Parada Domínguez, coordinadora de Nutrición y Dietética del Seguro Social, explicó que el organismo utiliza el agua para mantener el correcto funcionamiento de todos los procesos vitales en el cuerpo; también como refrigerante a través del sudor cuando la temperatura corporal se eleva demasiado, lo que implica la pérdida de líquidos sumado a los que expulsamos al respirar, orinar y defecar,
Los lactantes, son quienes mayor necesidad tienen de consumir líquidos, los cuales obtiene a través del pecho de la madre; si ésta consume bebidas azucaradas, el pequeño crecerá con el gusto por el azúcar, ya que durante meses la estuvo ingiriendo a través de la leche materna.
Esto es lamentable, ya que lo anterior incrementa el factor de riesgo para que el pequeño desarrolle obesidad, sobrepeso y otras enfermedades crónicas en el futuro, porque estará acostumbrado a obtener la saciedad a través de los azúcares.
Las propagandas sobre diversos productos que quitan la sed, también han deformado en la población el gusto por el agua natural manifestando que no les gusta su sabor; hay que recordar que el agua pura no tiene olor, color, ni sabor, por lo que tal vez resulte menos atractiva pero ésta es mejor hidratante que una bebida azucarada.
El IMSS recomendó retomar gradualmente el gusto por el agua natural utilizando líquidos de transición, es decir, aguas frescas de fruta natural y con poca azúcar, disminuyendo el endulzante poco a poco hasta lograr el gusto por el producto natural, así el cuerpo aprenderá a ser menos dependiente del azúcar para satisfacer el paladar.
El problema tal vez sea mayor en el caso de los niños que han adoptado el gusto por los refrescos, pues si se les obliga a tomar agua pura tal vez lo harán de mal modo y no por voluntad, la mejor manera de enseñarlos es con el ejemplo.
Los adultos mayores también deben priorizar el consumo de agua pura, pues este grupo de la población se deshidrata fácilmente porque en ellos la sensación de la sed se ve disminuida y no les es posible saber cuándo hay que beber agua.