Por: José Luis Domínguez Castillo
Se llama Isla Bermeja y está ubicada a 100 millas al norte de Yucatán y Campeche. Hay registros, como un documental de “Transtel” de la década de los 80, donde se apreciaban imágenes con árboles en el centro, con arena que apenas sobresale del nivel del mar; los narradores dicen claramente su nombre y localización en el Golfo de México.
Ahora que Enrique Peña Nieto deja la Presidencia de México, no tardarán en sacar los clásicos desfalcos e irregularidades cometidas durante su sexenio, como sucede con gobernadores, alcaldes, senadores, diputados y regidores, entre muchos otros más “servidores públicos”. Y como siempre: todo se les disculpará en nuestro bendito país y con el aval del nuevo Gobierno.
Por eso toma relevancia esta información que para muchos es un misterio, un mito, una fantasía de los mexicanos que odian en todo y por todo a los estadunidenses. El tema es tratado a detalle, pero a través de un whatsapp “colectivo” y no de manera “oficial”…lo que podría restar seriedad, obviamente.
Fechada el 10 de marzo de 2011, la denuncia circula en redes sociales. Explica que en México, los legisladores que participaron en la elaboración del Tratado Clinton-Zedillo (en el cual México y USA pactaron sus fronteras marítimas en el Golfo) tuvieron el poder para “desaparecer” la Isla Bermeja, apoyados por muchos cómplices más en nuestro país.
¿Y cuál fue la motivación de este increíble acto de magia? Para que, responden, México perdiera los derechos de explotar los yacimientos petrolíferos inmensos que alojan aproximadamente 22, 600 millones de barriles de petróleo.
Para dar por válido el fraude patriótico (uno más en la historia de México), se cita que el finado senador José Ángel Conchello se opuso a este despojo a la Nación, pero murió en un extraño accidente carretero nunca investigado, en 1998…desaparecieron también, de las minutas del Congreso, los nombres de los legisladores que participaron en este asunto del gobierno que encabezó Ernesto Zedillo Ponce de León.
Con la isla fantasma, Petróleos Mexicanos (PEMEX) obtendría ganancias por la explotación de esa inmensa zona petrolífera, pero todo está perdido para nosotros, no así para los americanos que presuntamente siguen a cargo de Bermeja.
Sin embargo, aclaran los autores de este documento, no es un hecho irreversible porque la isla está allí y el Tratado Clinton-Zedillo puede anularse para hacer uno nuevo; corregido y midiendo los derechos para México en un radio de 200 millas alrededor de la ínsula.
Imagínese usted la veracidad de esta información. Si al expresidente Zedillo no le han hecho nada, con el transcurso de las décadas, tampoco sucederá nada con todo lo que aparezca y “desaparezca” de la administración de Peña Nieto, como tampoco transcendió con Vicente Fox o Felipe Calderón.
Y para que ir tan lejos. César Duarte Jáquez robó medio estado de Chihuahua y como si nada. ¿Le parece –lo de la Isla Bermeja- un caso de utopía o fábula?, pues recuerde que ahora la realidad está superando la ciencia ficción.