Chihuahua, Chih.- En una entrevista con el periodista Ciro Gómez Leyva, la gobernadora María Eugenia Campos Galván dejó claro que la posible entrega de agua a Estados Unidos, en el marco del Tratado de 1944, es una decisión que corresponde exclusivamente al Gobierno del Estado, respetando la soberanía de las entidades federativas.
La mandataria estatal explicó que Chihuahua enfrenta una situación crítica por la sequía extrema, reconocida por la Conagua desde hace varios años. “Estamos viviendo una de las peores crisis; llevamos cuatro años sin lluvias regulares, sin posibilidad de siembra de autoconsumo, sin ciclo agrícola y con la pérdida del 50% del hato ganadero”, expresó.
Campos Galván aseguró que hay voluntad de colaboración con el Gobierno Federal, pero recordó que las presas del estado se encuentran apenas al 15% de su capacidad. “Nadie está obligado a lo imposible. Si no hay agua, no hay manera de cumplir”, subrayó.
Afirmó que tanto ella como la presidenta Claudia Sheinbaum están en la disposición de buscar una solución conjunta, y descartó que exista presión alguna desde el Ejecutivo federal. También adelantó que se valorará el uso de la presa El Granero, siempre en diálogo con los productores y con un enfoque realista, que no genere falsas expectativas ni compromisos imposibles con el gobierno de Estados Unidos.