Descontento en el SNTE/ Morena rumbo al PRI/ Reforma Infonavit 

EL DESCONTENTO entre los maestros federales en Chihuahua ha escalado a tal grado que el paro laboral iniciado el pasado viernes se extendió hasta este lunes 24 de febrero. Los docentes, agremiados al SNTE, exigen que se respeten sus derechos laborales ante la reciente reforma al ISSSTE, la cual ha generado incertidumbre y malestar en el sector educativo.

Si bien el SNTE históricamente ha sido acusado de alinearse al mejor postor, en este caso, Morena, esta vez ha tomado una postura firme en defensa de los trabajadores. Sin embargo, la pregunta que resuena es: ¿se trata de una lucha genuina por los derechos laborales o es un movimiento estratégico en el tablero político? Lo cierto es que el malestar entre los maestros refleja un problema más profundo: la falta de diálogo y consenso en la implementación de reformas que afectan directamente a los trabajadores y si no que le pregunten a Eduardo Zendejas a quien le dieron tremenda sarandeada hace unos días en ciudad Juárez.

MORENA, EL PARTIDO QUE LLEGÓ AL PODER prometiendo un cambio radical y una lucha frontal contra la corrupción, parece estar adoptando prácticas que lo acercan peligrosamente al viejo PRI. La reciente afiliación de figuras como Miguel Ángel Yunes y Alejandro Murat, quienes en su momento fueron exhibidos como ejemplos de la corrupción, ha generado un fuerte descontento incluso dentro de las filas morenistas.

Gobernadores y militantes han expresado públicamente su rechazo a estas incorporaciones, calificándolas como un acto de oportunismo político. Además, críticos desde el ámbito artístico y cultural han señalado que Morena está repitiendo los mismos vicios que tanto criticó.

LA RECIENTE REFORMA A LA LEY DEL INFONAVIT ha encendido las alarmas entre expertos financieros, quienes advierten que podría comprometer los ahorros de los trabajadores y aumentar la cartera vencida del Instituto. Enrique Díaz Infante, director de Estudios Financieros en el Centro de Estudios Espinosa Yglesias, ha señalado que esta reforma pone en riesgo más de 2.4 billones de pesos en activos del Infonavit, al destinarse a proyectos de construcción que podrían no ser recuperables.

Este escenario recuerda al del Banco del Bienestar, donde uno de cada cinco pesos prestados no se recupera, lo que ha obligado a rescates con recursos públicos. De implementarse sin cambios, esta reforma podría generar un déficit significativo en el Infonavit, afectando directamente a los trabajadores que confían en esta institución para su futuro.