El secretario general de Gobierno, Santiago de la Peña Grajeda, expresó su preocupación ante el modelo de transporte propuesto por la Unión Nacional de Transportistas, A.C. (UNTRAC) en la ciudad de Chihuahua, calificándolo de problemático y con un historial de «dolores de cabeza» tanto para las autoridades como para los usuarios en Ciudad Juárez.
En entrevista, De la Peña destacó que el 98% de los autobuses en la capital cumplen con los requisitos de ley, particularmente en lo que respecta al año modelo de las unidades, y cuestionó que una organización como UNTRAC, que ha sido señalada por operar con camiones en malas condiciones en Juárez, pretenda introducir su sistema en Chihuahua. «¿Cómo pueden venir a una ciudad donde el transporte público tiene un alto nivel de cumplimiento, y hacerlo quienes representan una de las organizaciones que más han afectado a los usuarios en Ciudad Juárez?», preguntó el funcionario.
El secretario afirmó que la mayoría de los llamados «camiones pirata» en Ciudad Juárez están afiliados a UNTRAC, y recordó que hace más de un año y medio se les ofreció la oportunidad de regularizar su operación. «Se les invitó a dejar de importar autobuses chatarra de Estados Unidos y empezar a adquirir unidades nuevas, o al menos que cumplieran con los criterios de año modelo. A cambio, el gobierno del estado les ayudaría en ese proceso de regularización. Sin embargo, lo que hemos visto es que continúan trayendo autobuses escolares obsoletos, que en algunos casos apenas se mantienen funcionando», indicó.
De la Peña señaló que la población de Juárez no merece ese servicio deficiente, y mucho menos la de Chihuahua. «Aquí en la capital, el transporte público funciona bien, y los concesionarios han cumplido con el compromiso de mejorar sus unidades desde el ajuste tarifario del año pasado. Hoy, estamos cerca del 98% de cumplimiento en año modelo de los camiones», subrayó.
El secretario criticó la intención de UNTRAC de instaurar un modelo de transporte que, según él, se caracteriza por «el incumplimiento y la agresión al usuario», al cobrar tarifas elevadas sin invertir en vehículos adecuados. «No podemos permitir que este modelo de irregularidad se instale en Chihuahua», sentenció.
Finalmente, De la Peña exhortó a los integrantes de UNTRAC a concentrarse en Ciudad Juárez y trabajar en mejorar el servicio, adquiriendo autobuses nuevos y regularizando su operación. «No queremos que utilicen la capital o cualquier otra ciudad del estado como un botín político para expandir una cultura de incumplimiento en el transporte», concluyó.