Tanto el Gobierno de México como el de Guatemala reforzaron la seguridad de sus fronteras debido a los continuos enfrentamientos en Chiapas que ya causaron el desplazamiento de centenares.
Elementos del Ejército Mexicano, Guardia Nacional y Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana de Chiapas llegaron el domingo a Amatenango de la Frontera, desde donde salieron de sus casas familias, que ahora se refugian en Guatemala.
Por su parte, las autoridades de Guatemala anunciaron un despliegue en el departamento de Huehuetenango, que colinda con Chiapas, donde alrededor de 600 mexicanos están en refugios.
Soldados guatemaltecos y miembros de la Policía Nacional Civil (PNC) mantienen un operativo de control y atención a víctimas de la violencia, que comenzaron a recibir víveres y atención médica tras su arribo.
Según el Ejército de Guatemala, la presencia de sujetos relacionados con grupos armados del lado mexicano fue vista el domingo por la mañana cerca del punto donde se tendido el cerco de seguridad, lo que llevó a los oficiales a montar barricadas y cavar tierra abajo para tener puntos de protección en caso de un enfrentamiento.