La gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos Galván, confirmó que existe una amenaza por parte del gobierno federal, Morena y Tamaulipas, por llevarse el agua de la Presa el Granero.
En ese sentido, la mandataria estatal informó que el gobierno de Chihuahua defenderá con uñas y dientes lo que le pertenece a la entidad.
“Quiero reiterar la determinación de parte de su Gobernadora, de parte del gobierno del estado, de no dejar que el gobierno federal, que la 4T, que Morena se lleve el agua que corresponde al estado de Chihuahua y que corresponde a los agricultores, si tenemos ahorita amenazas de llevarse el agua de la Presa el Granero que se encuentra al 40% de su capacidad”, dijo Campos Galván.
La gobernadora indicó que no permitirá que se lleven el agua de Chihuahua, sobre todo en estos tiempos tan difíciles como es la sequía, además de la eliminación de varios fideicomisos y apoyos para el campo.
“Estamos peleando y vamos a seguir peleando con uñas y dientes para que no se lleven el agua de Chihuahua”, concluyó la gobernadora.
La amenaza de llevarse el agua de la Presa el Granero se ha generado a raíz de la sequía que se vive en la región. La presa se encuentra al 40% de su capacidad, por lo que el gobierno de Chihuahua teme que se agote el agua si se le envía a Tamaulipas.
El gobierno de Tamaulipas ha solicitado al gobierno federal que se le autorice a recibir agua de la Presa el Granero para paliar la sequía que se vive en la entidad. Sin embargo, el gobierno de Chihuahua se ha negado a otorgar el permiso, argumentando que la presa es propiedad de la entidad.
El conflicto por el agua entre Chihuahua y Tamaulipas podría derivar en un enfrentamiento legal. El gobierno de Chihuahua ya ha contratado a un despacho jurídico para defender sus intereses.