La nota la dio sin duda el gobernador Javier Corral al emitir públicamente su resentimiento contra quienes todavía no se va y ya lo traicionan ¡en su gobierno!
En un post que le dio la vuelta al país en unas cuantas horas, Corral dijo sentir pena ajena por aquellos a los que les dio oportunidad de trabajar y ya andan “reciclando lealtades”, es decir, buscan granjearse a la que llegará por la oportunidad de conservar su puesto.
Se dijo y con toda razón, indignado de quienes ahora le dan la espalda, “duele la indignidad”, les dijo.
Posteó: “Lo que en realidad me puede más, es ver tanta indignidad contra sí mismos; siento pena ajena de ver cómo se reciclan las lealtades, y todo lo que tienen que hacer para granjearse una nueva oportunidad o conservar un trabajo al que tendrían derecho por su propio esfuerzo”.
Cerró diciendo: “Que época tan frágil, la que ahora estamos viviendo, en el concepto esencial de la dignidad humana”.
El rey ha muerto…
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Hablando de deslealtades, el que propondrá expulsación ipso facto, en caliente, en automático o como se le quiera llamar, es el dirigente del Comité Directivo Municipal del PAN en Juárez, Joob Quintín, contra todos los que apoyaron a otros candidatos y partidos en las pasadas elecciones.
Quintín habla de al menos 15 militantes a quienes habrían sorprendido apoyando a distintos candidatos y haciendo como que apoyaban a los de Acción Nacional.
Son varios los comités municipales azules los que se han sumado a la exigencia. Ayer, el de Juárez acordó en sesión, proponer la sanción a tres “bloques” de militantes.
Se buscará la expulsación automática para aquellos que se sabe, apoyaron abierta y públicamente a otros candidatos e incluso asistieron a eventos públicos.
Habrá investigación para quienes al parecer fungieron como representantes de casilla de otros partidos políticos.
El tercer bloque sería de los que atacaron a la hoy gobernadora electa, Maru Campos y denostaron a las dirigencias de los partidos en coalición.
Cada quien y sabe a quién y a quienes se refiere el Quintín.
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El Instituto Estatal Electoral aclaró que a pesar de que hay impugnaciones en proceso de desahogo en contra de la elección de gobernador, esto no impide que el la transición de gobierno siga su marcha.
Según el consejero del IEE, Saúl Eduardo Rodríguez Camacho, la entrega-recepción es una situación que ya queda fuera del ámbito electoral.
Tampoco aceptó que el organismo electoral se hubiera equivocado al enviar el resultado de la elección, es decir, el triunfo de la candidata del PAN-PRD, al Congreso del Estado y que éste a su vez emitiera la Declaratoria de Validez a favor de Maru.
Esto porque son los procedimientos que establece la ley después de cada elección y ya será el Tribunal Electoral estatal o las instancias superiores, las que determinen lo que proceda en caso de que fueran aceptadas y validadas las impugnaciones.
Así que mientras sean peras o manzanas, el equipo de Maru sigue trabajando para recibir el gobierno de manos del equipo de Corral.
Obviamente todo esto deberá quedar resuelto antes del 8 de septiembre, fecha que establece la Constitución para que asuma el nuevo Gobierno estatal.
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El Comité Directivo Estatal del PRI capacitará a los próximo servidores públicos que ganaron elecciones, llámense alcaldes, síndicos y diputados.
César Alejandro Domínguez, quien dirige las riendas del partido, ya puso a trabajar a todos sus electos para que ayuden haciendo un diagnóstico en sus respectivos ámbitos, de las principales necesidades sociales para establecer la agenda de trabajo.
Domínguez hizo suyas las palabras de la excandidata a gobernadora, Graciela Ortiz, en el sentido de hacer a un lado enconos, resentimientos y hasta rivalidades para ponerse a trabajar por el partido.
El PRI tiene 30 sindicaturas, 28 alcaldías y dos diputados locales seguros, más los que se sumen por la vía de la gracia plurinominal.
Esto es un buen capital político para seguir gobernando y a la vez, ser oposición.
