De los 15 gobernadores en cuyos estados habrá elecciones para reemplazarlos en junio, solamente cuatro cuentan con un nivel de aprobación ciudadana mayor a 50 por ciento: el panista Francisco Domínguez, de Querétaro, con 61 por ciento; la priista Claudia Pavlovich, de Sonora, con 55 por ciento; el priista Quirino Ordaz Coppel, de Sinaloa, con 52 por ciento, y el panista Carlos Mendoza Davis, de Baja California Sur, con 51 por ciento.
Así lo revelan las encuestas de EL FINANCIERO realizadas en las 15 entidades a lo largo del mes de marzo.
Según el estudio, otros cinco gobernadores cuentan con niveles de aprobación entre 41 y 47 por ciento, incluidos los de Campeche, Tlaxcala, Baja California, Nayarit y Zacatecas.
Los restantes seis gobernadores cuentan con niveles de aprobación entre 32 y 39 por ciento, incluidos los de Michoacán, Colima, Guerrero, San Luis Potosí, Chihuahua y, en el fondo de la tabla, Nuevo León. En estos últimos casos, la desaprobación ciudadana es la que predomina.
El promedio de aprobación en las 15 entidades es de 44 por ciento, según el estudio.
Ese promedio era de 45 por ciento en agosto pasado y de 48 por ciento en diciembre, lo cual indica que en el agregado la aprobación a los gobernadores ha bajado.
Los estados donde más bajó la aprobación al gobernador en el último trimestre, de diciembre a marzo, fueron Guerrero (-15 puntos), Tlaxcala y Colima (-14 punto cada uno), y Baja California Sur (-10 puntos).
Por: El Financiero