Ciudad de México.- La designación de Roque Martínez Amparán como Subdirector de Administración de Conagua en Chihuahua es preocupante, no sólo por los señalamientos de abuso e irregularidades que habrían sido cometidas durante su desempeño en diversos cargos públicos, sino porque su estrecha relación con el actual gobierno del estado y el panismo pone en entredicho el verdadero cumplimiento de los objetivos planteados por el actual gobierno federal, declaró el senador Cruz Pérez Cuéllar.
“Estamos hablando de un problema de congruencia, que tiene que ver con la asociación de Roque Martínez con los principales críticos y opositores de las políticas del presidente Andrés Manuel López Obrador, que se encuentran anidados en el actual gobierno del estado, donde Martínez ha trabajado como Director Técnico de la Junta Central de Aguas, como asesor de juntas municipales, y ha ocupado otros cargos en administraciones anteriores del PAN. Hablamos de una Caballo de Troya en esa parte de la administración”, explicó el legislador morenista.
Así también, recordó que el mencionado funcionario de Conagua tiene más de 22 años como militante del PAN y que siempre ha estado del lado opositor al que ahora pretende estar aliado, aunque sea por la vía de la nómina.
Explicó que en archivos periodísticos se le ha mencionado por varias irregularidades como cuando trabajaba en el área de Administración del Agua en la propia Comisión Nacional del Agua, durante el sexenio panista de Felipe Calderón, cuando era director local Sergio Cano Fonseca, tiempo en el que fue señalado por vender títulos de concesión.
En noviembre del 2016 Roque Martínez fue nombrado Director Técnico de la Junta Central de Aguas y Saneamiento, y permaneció allí hasta el 31 de agosto de 2017, también perteneció al equipo de Roberto Lara Rocha en la Junta Municipal de Aguas, en Chihuahua, Capital, después habría trabajado para otros organismos del mismo ramo, incluso en Desarrollo Rural del gobierno estatal, pero siempre cerca de las administraciones panistas.
Pérez Cuéllar subrayó que “es alto el riesgo” colocar a alguien de esa trayectoria en la Subdirección de Administración de la Conagua, y los problemas que en el futuro se susciten pueden prevenirse, pero si no se atiende la advertencia ahora después será demasiado tarde.