En su posicionamiento por la Reforma Educativa aprobada el 20 de septiembre, la Presidente de la Comisión de Juventud y Niñez – Marisela Terrazas, dio a conocer que dentro del primer punto debemos preocuparnos por la desaparición del Instituto Nacional de Infraestructura Física Educativa, quien era la institución encargada de administrar los recursos y lineamientos para el mantenimiento de los planteles. La pregunta es ¿quién será el responsable de la contrataciones y supervisión de las obras en las escuelas? ¿Pretendemos que sean los directores o padres de familia los responsables de estos temas? ¿No nos parece suficiente con lo que ya se ha vivido por el derrumbe de escuelas en la CDMX cobrando decenas de víctimas?
Agregó que los proyectos de ley aprobados son anticonstitucionales, una regresión autoritaria, redundantes, centralistas y contradicen el federalismo educativo.
En su mensaje en el pleno del Congreso de Chihuahua, puntualizó que este Gobierno Federal no tiene como objetivo fortalecer a las instituciones. También mencionó que estas leyes secundarias viola de manera clara el interés superior de la niñez en cuanto a educación de excelencia, al no proveerles ni regular correctamente la educación inicial como parte de la educación básica y obligatoria.
“Si realmente nos interesa que nuestras niñas, niños y adolescentes tengan una educación de calidad; que a nuestros docentes se les dignifique por su labor y vocación; comencemos por elevar y profesionalizar nuestras Escuelas Normales, innovando sus planes de estudios, motivando a todos los actores educativos para que sean conscientes de que en sus manos se encuentra realmente la transformación de México”
Ningún país sale adelante debilitando sus instituciones y fortaleciendo sindicatos, ningún país sale adelante arriesgando lo más importante: su niñez, ningún país progresa si no invierte en educación de calidad.
Las evaluaciones serán como en el pasado dice Marisela Terrazas- un proceso más de simulación y manipulación para nuestros maestros, porque estas leyes ya aprobadas establecen que las evaluaciones NO definirán la permanencia de los maestros y maestras en sus plazas poniéndolos en un panorama incierto en donde aquellos docentes que se preparen, se esfuercen y sobre salgan por su trabajo, NO serán aquellos que necesariamente trasciendan dentro de su ámbito laboral.
Quedarán los maestros desprotegidos a expensas de las decisiones de los sindicatos, porque se contempla la eliminación del Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEE) y la creación del Sistema Nacional de Mejora Continua, coordinado por un organismo público descentralizado, es decir, eliminando su autonomía técnica, operativa, presupuestaria, de decisión y de gestión con personalidad jurídica y patrimonio propio.
¿Dónde queda el ímpetu de transparencia y combate a la corrupción del Presidente? ¿Cómo podemos seguir hablando de dignificar la labor docente sin ofrecer panorama certero y piso parejo para todos? ¿Cómo podemos exigir calidad educativa y mejores maestros, si no promovemos a aquellos que se esfuerzan más y se preparan más?