Las elecciones del domingo en seis entidades se distinguieron por sus bajas cifras de participación ciudadana. En promedio, sólo acudieron a las urnas tres de cada 10 personas.
Y es que al considerar la participación ciudadana en las seis entidades, el promedio arroja un 33.6 por ciento de personas que acudieron a las urnas, contra un 66.4 por ciento de abstencionismo.
El mejor ejemplo fue la elección de Quintana Roo, que tuvo una cifra récord de 78 por ciento de abstención. “Es una cifra sin precedentes en la historia de participación electoral del estado”, admitió la presidenta del Consejo General del Instituto Electoral de Quintana Roo, Mayra San Román Carrillo, donde se eligió solamente al Congreso local.
En la jornada del 2 de junio, destaca la elección extraordinaria en Puebla, donde la ausencia de votantes pasó de un 55.4 por ciento en 2015 –cuando se eligió al panista, Antonio Gali– a un 34 por ciento en 2018, –cuando triunfó la también panista Martha Erika Alonso–, a 77 por ciento el pasado domingo.
En esta entidad, el consejero presidente de la junta local del Instituto Nacional Electoral (INE), Joaquín Rubio Sánchez, opinó que lo que influyó para la ausencia de votantes en las urnas fue, sin duda, “el fantasma” de la violenta elección del 2018, así como las malas campañas electorales y que los candidatos no lograron convencer al electorado.
Sin embargo, sostuvo que, aunque este año existieron las condiciones para que la gente saliera a votar, seguramente en “el imaginario popular” persistió el temor a una jornada violenta. La participación fue de sólo 32.33 por ciento.
En Baja California, con el 90.8 por ciento de las actas computadas, la participación fue de 29.63 por ciento; es decir, una abstención de 70.37 por ciento.
En Quintana Roo, con el 100 por ciento de las actas computadas, se confirmó una participación de 22 por ciento. En Durango, con el 97% de las actas, el abstencionismo alcanzó el 52.2 por ciento, en unos comicios para elegir sólo a presidentes municipales.
En Tamaulipas, la participación fue de apenas 33%; es decir, una abstención del 67 por ciento en la entidad, de acuerdo con el 99.8 por ciento del cómputo de actas.
Aguascalientes registró una participación de 38.9 por ciento y un abstencionismo del 61.1 por ciento, con el 100 por ciento de las actas computadas.
Sobre este fenómeno, el diputado de Morena, Porfirio Muñoz Ledo, alertó que el alto nivel de abstencionismo en los comicios estatales del domingo “recuerdan las cifras del antiguo régimen”, que “no son alentadoras para la democracia”.
Por ello, llamó a la clase política a “no derrumbar la escopeta del sufragio”, porque estimó que “necesitamos no solamente plazas llenas, sino urnas llenas”.
A raíz de los resultados de las elecciones locales y, sobre todo, del alto grado de abstencionismo, el presidente de la Cámara de Diputados agregó que “hay desencanto democrático. México necesita urnas llenas de votos libres y participación ciudadana activa para exigir buenos gobiernos y colaborar en la construcción de la paz”.
Felicitó a los candidatos que triunfaron en las elecciones para gobernador. “Felicito a los compañeros de partido que han obtenido victorias en BC y Puebla. Confiamos en su contribución a la 4T”, dijo.