Anuncia el gobernador Javier Corral inversión de 28 millones de pesos para construir 241 dormitorios, 55 cocinas y 59 baños en la capital
En atención al compromiso supremo de la actual administración estatal de realizar trabajo interinstitucional para el desarrollo social y humano de quienes menos tienen, menos saben y menos pueden, este día el gobernador Javier Corral puso en operación el Programa de Mejoramiento de Vivienda para Familias Indígenas y Prioritarias de Chihuahua, con inversión de más de 28 millones de pesos en beneficio de 330 familias.
El acto protocolario se efectuó en el Parque Lineal de Vista Cerro Grande, en Avenida Nueva España, entre las calles 52 y 56 de la ciudad de Chihuahua, donde el mandatario expresó que el programa está encaminado a combatir la marginación, la discriminación y el abandono que han sufrido por años los pueblos indígenas.
En total se destinarán a estas acciones, 28 millones 21 mil 114 pesos, del Fondo de Aportaciones para Infraestructura Social (FAIS), e implica la construcción de 241 dormitorios, 55 cocinas y 59 baños. Además, 64 de las construcciones fueron diseñadas tomando en cuenta las necesidades de personas con discapacidad.
Como parte de la ceremonia, el gobernador entregó al boxeador y medallista olímpico mexicano Misael “El Chino” Rodríguez, las llaves de una casa en Ciudad Juárez, en cumplimiento a su desempeño al poner en alto a México y a Chihuahua en diversas competencias deportivas.
En su mensaje, el gobernador expresó su beneplácito por iniciar un programa que muestra la convicción del Gobierno estatal de atender de manera prioritaria a quienes menos tienen y más lo necesitan.
“Si de algo estamos conscientes en este Gobierno, es de la enorme deuda que se tiene con los pueblos indígenas, a quienes históricamente se les ha excluido de la agenda y de la construcción de políticas públicas, pero además se les ha desatendido, lo que ha provocado altos niveles de pobreza y poco acceso a servicios educativos y de salud, entre otros”, declaró.
Dio a conocer que actualmente Chihuahua es el sexto municipio del estado con mayor número de población indígena: “aquí habitan más personas indígenas que en Batopilas o Bocoyna, sin embargo, hasta esta administración no se había dado un esfuerzo gubernamental coordinado, capaz de atender las necesidades específicas de estas familias y sus comunidades”, dijo.
Destacó el trabajo conjunto que desarrollan la Comisión Estatal de Pueblos Indígenas, la Secretaría de Desarrollo Social y la Comisión Estatal de Vivienda, Suelo e Infraestructura, respetuoso de los derechos colectivos de los pueblos indígenas, en coordinación con las autoridades tradicionales.
“Gracias a ello hoy podemos arrancar un programa que beneficiará a 330 familias de la ciudad de Chihuahua, 40 por ciento (%) de las cuales son indígenas, mientras que el resto de las familias beneficiadas enfrenta alguna condición de vulnerabilidad; 40 (%) tiene como jefa de familia a una mujer y son hogares habitados por 126 niñas, niños, adolescentes y jóvenes; mientras que en el 20 (%) restante habitan personas mayores de 65 años”, explicó.
A través de este programa se busca no sólo mejorar las viviendas de las familias indígenas de la ciudad, sino refrendar el compromiso de la administración estatal de atender a la gente más vulnerada, así como garantizar el derecho a viviendas dignas y dar respuesta efectiva a las demandas y necesidades de las comunidades indígenas urbanas.
Destacó la labor de las 15 gobernadoras y 2 gobernadores rarámuris de este asentamiento, porque este programa es resultado también de su esfuerzo, gestiones y acompañamiento, por lo cual agradeció su participación y apoyo.
“Les reitero mi compromiso de seguir trabajando para sentar las bases que permitan que todas las familias chihuahuenses salgan adelante en igualdad de condiciones y que todas y todos tengan un futuro prometedor”, apuntó el gobernador.
Finalmente, agradeció a los titulares de Coepi, Desarrollo Social y Coesvi, porque esta iniciativa transformará la vida de las y los beneficiarios.
A su vez, la comisionada estatal de Pueblos Indígenas, María Teresa Guerrero Olivares, agradeció a las instancias que sumaron esfuerzos y recursos en beneficio de las personas de origen indígena que viven en esta zona de la ciudad.
Explicó que se realizó un censo en el área para detectar a las familias rarámuris y quiénes requerían el apoyo del Gobierno.
En su intervención, María Luisa Palma, gobernadora indígena de La Noria, expresó su gratitud a nombre de las familias de la comunidad que representa por el apoyo que recibieron y solicitó que siga este esquema, toda vez que existen muchas otras familias que también requieren del programa.