Por: José Luis Domínguez Castillo
Para muchos pasará desapercibido, por el simple hecho de no tener los suficientes y oportunos recursos a su alcance, aunque otros tantos esperan con “ansias” la festividad consumista del año. De hecho, con esta campaña se inaugura formalmente la temporada de compras navideñas: “El Buen Fin” y el “Black Friday” para México y Estados Unidos, respectivamente.
El Gobierno, a través de la Secretaría de Hacienda, insiste en que es un apoyo a la economía de los mexicanos y en esta edición será del viernes 16 al lunes 19 de noviembre, aprovechando el super puente. Las ventas este año podrían rebasar los 100 mil millones de pesos, porque muchos aprovecharán sus aguinaldos, dicen; sin embargo, no todas las empresas, instituciones y negocios se solidarizan porque la Ley les obliga esa entrega hasta el 20 de diciembre.
Fue a partir del año 2011 cuando nace como iniciativa de impulsar la economía del país con la participación de miles de establecimientos que ofrecen sus productos o servicios con diversas promociones y ofrecen crédito a meses sin intereses. Pero su verdadera finalidad es contrarrestar las significativas rebajas en muchas tiendas de EEUU con su Black Friday.
Si bien El Buen Fin es una estrategia para fomentar el comercio y el consumo de productos mexicanos -además de reactivar la economía del país-, causa mayor furor en los estados fronterizos por su obvia cercana demarcación con la nación que gobierna Donald Trump.
Y será interesante, particularmente en Chihuahua, saber qué resultados tendrá este año con todos los problemas sociales registrados, por ejemplos: migrantes de otros países estacionados en Ciudad Juárez, el natural aumento de soldados americanos en los puentes internacionales y custodios del multicitado muro, conflictos aderezados por la constante amenaza de deportación de miles de connacionales, etcétera.
Todo ello, aunado a las largas filas y horas para poder cruzar, inhiben los deseos de gastar en tierras del imperialismo yanqui. Es la oportunidad, anhelan los preocupados organizadores, de dar un gran golpe al Viernes Negro, como ya fue vencido su “Cyber Monday” por “El Día del Soltero” en China.
El ciber lunes es un día dedicado a compras por Internet y se celebra después de la festividad de Acción de Gracias, pero la festividad china que surgió en 2009 y celebrada el pasado domingo, superaría al BF y CM juntos. La dimensión global del Día del Soltero en sus ventas realizadas a través de portales electrónicos fueron casi tres veces más el año pasado y, todo parece indicar, este no será la excepción.
Pero volviendo al mercado mexicano y particularmente de nuestra entidad, El Buen Fin no acaba de convencer del todo. Cada año termina con una serie de denuncias por atracos y engaños cometidos por no pocos establecimientos participantes: desde los sobreprecios a los artículos ofertados como la rápida y curiosa inexistencia de los mismos.
Lo peor de todo es el “gancho” en las compras de aparatos electrónicos con el uso de tarjetas de crédito y débito, a meses sin intereses que finalmente terminan endeudando más a los clientes…claro, por abuso y hasta desconocimiento de su aplicación.
Como sea, si usted tendrá manera de utilizar parte de su aguinaldo o ahorros en este próximo Buen Fin, hágalo con responsabilidad, no vaya a resultar como el conocido refrán de salir “más caro el caldo que las albóndigas”.
Además, la situación financiera familiar no está muy bien que digamos. La preocupación está en muchos otros temas de mayor prioridad…aunque no le quitamos la ilusión de participar en esta difundida festividad consumista nacional.