Por FISHERMAN
La Suprema Corte de Justicia de la Nación la volvió a hacer, primero fueron la aprobación de los matrimonios gays, ahora crean jurisprudencia para dar paso definitivo a la legalización del consumo de marihuana para uso lúdico, dando así otro golpe ya no sólo a las cientos de miles de familias que no están de acuerdo, sino que demostrando que La Cámara de Diputados y Senadores, no sirven para nada.
Así es, once magistrados de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, están haciendo lo que 500 diputados y 300 senadores del país, no han querido autorizar, quizá por temor al juicio de la historia o porque en verdad están convencidos que permitir que todo mundo pueda consumir marihuana, no es la solución para el problema en México y que seguramente agravara esta enfermedad.
Si lo vemos de la suma de fuerza de 800 legisladores, ya sean diputados o senadores, en realidad no sirven para detener lo que la SCJN considera, léalo bien, 11 magistrados deciden permitir el uso y siembra de la marihuana, pero sólo eso, no dicen cómo se debe regular, ellos simplemente autorizan a que se pongan bien “grifos”.
Los ministros si se equivocan nadie los puede remover, la Corte está integrada por 11 ministros, cada uno es nombrado por un periodo de 15 años, dentro de los cuales de ninguna manera pueden ser removidos de su cargo, a menos que se les determinen responsabilidades oficiales de acuerdo a lo dispuesto por la legislación en materia de responsabilidades de funcionarios públicos.
Pero lo más grave es que toman una decisión de autorizar el consumo y siembra invalidando artículos de la Ley General de Salud, los cuales prohíben el “sembrar, cultivar, cosechar, preparar, poseer, trasportar y adquirir de forma legal la semilla de la cannabis, para uso personal.
Y la argumentación es muy sencilla, dichos artículos, “violan los derechos humanos, el pluralismo, la personalidad, la libertad personal y corporal” y en base a esa decisión de violación de derechos humanos pueden cambiar cualquier ley y artículo de la Constitución Mexicana que moleste a alguien y se sienta agredido.
Por eso digo, para que sirven los diputados y senadores, si todo se esta gestando y cambiando desde la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Ellos con la mano en la cintura borran artículos de la Constitución o los cambian o desechan, como en este caso. Ahora sí, ¿para que queremos legisladores?.